Los gatos caracal habitan en una variedad de hábitats en África, Oriente Medio y Asia Central. Prefieren zonas áridas y semiáridas, como desiertos, matorrales y sabanas, aunque también se pueden encontrar en bosques y zonas montañosas.
En África, se encuentran principalmente en la parte norte y oriental del continente, desde Marruecos hasta Etiopía, y en algunas regiones de África del Sur. En Oriente Medio, se pueden encontrar en Israel, Arabia Saudita, Omán, Emiratos Árabes Unidos y Kuwait. En Asia Central, se encuentran en países como Irán, Turkmenistán y Uzbekistán.
Los caracales son animales muy adaptables y pueden sobrevivir en una amplia variedad de entornos, siempre y cuando dispongan de un suministro adecuado de presas y suficiente cobertura para protegerse de los depredadores y el clima extremo. A menudo se pueden encontrar en áreas donde hay vegetación densa, como arbustos y árboles, ya que les proporcionan un lugar para descansar y acechar a sus presas.
Sin embargo, el hábitat natural de los caracales se encuentra amenazado debido a la pérdida de hábitat y la caza furtiva. Es importante proteger y conservar su hábitat natural para asegurar su supervivencia a largo plazo.
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